Historic "Cortijo" in Campo Cámara: "Entredicho"

This Cortijo, called Cortijo del Entredicho is part of the history of Campo Cámara. Actually, it's part of the history of Cortes de Baza, because Campo Cámara did not exist as a town jut then. The Cortijo del Entredicho was originally called Cortijo Casablanca and was owned by Gerónimo de Peralta. In the year 1622, the people of the town of Quesada considered that this Cortijo was in their town limits, but the people of Cortes de Baza argued that the famous Cortijo was in their territory. Eventually, that was considered true and from the year 1754, the limit of Cortes de Baza goes as far as the top of the hill just behind the Cortijo. Extracto del Atlas de Cortes de Baza: http://www.lahistoriaconmapas.com/historia/historia2/geografia-e-historia-de-cortes-de-baza-espana/ El 2 de enero de 1622, Álvaro Gil de Quiñones, Alcaide Gobernador de la Villa de Cortes, dice haber tenido noticia de que Alguaciles de la Villa de Quesada, entraron en el Cortijo Gerónimo de Peralta, llamado “de Casablanca”, actual Cortijo del Entredicho, que está en Campocámara, jurisdicción de la Villa de Cortes y prendieron a sus labradores y les llevaron sus ganados, teniéndolos presos en la Villa de Quesada. A las acusaciones de la Villa de Cortes, responde el Corregidor de la Villa de Quesada el 16 de octubre de 1622, que el lugar origen del conflicto pertenecía a la jurisdicción de Quesada y que los límites atravesaban Campocámara y no lo dejan a un lado. El límite iba desde la Peña de Quesada hasta unos pinos cercanos a la Peña de la Marcolla. La Villa de Quesada se basó en lo establecido por el Licenciado Francisco de Yepes en el pleito entre la Ciudad de Baza y la de Úbeda el 28 de Agosto de 1495, tres años antes de la sentencia del Licenciado Diego López de Trujillo. Conflicto por las Bellotas, en 1622 Los pleitos de límites y amojonamiento dieron lugar al denominado conflicto de las bellotas, octubre de 1622. Este curioso suceso fue protagonizado por los vecinos de Campocámara y los de Pozo Alcón (Jaén). Éstos acudían hasta los lugares donde abundaban las encinas a efectuar la recolección de bellotas. Cuando las gentes de Campocámara advirtieron su presencia, dieron la voz de alarma a las autoridades de la Villa de Cortes, puesto que, según ellos, las gentes de Pozo Alcón estaban recogiendo bellotas en unos terrenos que les pertenecían a ellos. La reacción inmediata fue que el 15 de octubre de 1622 se desarrolló un pleito en la Real Chancillería de Granada. El gobernador de la Villa de Cortes le dijo al justicia de Quesada que mandase pregonar en el lugar de Pozo Alcón que ninguna persona vareara, cogiese ni llevase bellotas de ese lugar. Sin embargo, el corregidor de la Villa de Quesada respondió diciendo que no había lugar ni motivo para impedir a los habitantes de Pozo Alcón que recogiesen bellotas del mencionado término, ya que esos terrenos pertenecen a la jurisdicción de la Villa de Quesada. El corregidor se basaba en los límites reales, que eran los establecidos por el licenciado Francisco de Yepes en el Pleito entre la Ciudad de Úbeda y la de Baza. El 26 de diciembre de 1632, ante don Diego Ruiz de Segovia se otorgó escritura, ratificando la anterior, de resultas de un pleito entre el marqués de Aguilafuente y la citada villa de Cortes. Después de dos o tres discordias entre Cortes y los duques de Abrantes (descendientes y herederos de don Enrique Enríquez), terminadas por sentencia de la Audiencia de Granada a favor de dichos duques, es decir, reconociéndoles el derecho a cobrar los diezmos, se hizo entre dichos señores y los propietarios por separado con cada uno de ellos una permuta de dichos diezmos por un censo enfiteútico que es el que rigió hasta que pasaron a manos de los Sres. Herederos de Don Andrés Pío Fernández. Los límites actuales se fijan en 1754